ALLA VAMOS OTRA VEZ

Después del entusiasmo inicial por intentar tocar con la punta de los dedos el Mundo del Arte que existe ahi fuera, vino el fracaso de no vender nada de nada. Lo intenté una y otra vez.

Sí, es cierto. Me gasté demasiado dinero intentándolo y soñando, pero no es lo que le pasa a todo el mundo cuando empiezan?

Luego vino el fatal desencanto, cuando me cortaron las alas sin piedad. El despertar de mi sueño. El hacer frente a la triste realidad que, a pesar de todo el apoyo inicial and todas las bellas palabras, esto no era para mí: Yo era -soy- un fracaso, con todas las letras. Sin lugar a dudas y sin esperanzas,

Sin embargo, después de un tiempo de estragos internos, después de un tiempo de desesperación, después de todos los ‘para qué me molesto’ rebotando desde todos los rincones de mi cerebro y de mi alma, después de todo eso vino El Resplandor.

No estoy muy segura de dónde llegó, ni de cuándo empezó pero de pronto me entraron otra vez las prisas y la necesidad de pintar otra vez. de fundirme en mi nuevo estilo, la mezcla de colores, la emoción del experimento.

Claro, la exposición que estaba por llegar y a la cual me había afortunadamente comprometido ya el año anterior, me hable devuelto mis alas, por maltrechas que estuvieran,

Y así, Allá Vamos Otra Vez. Presentaré mi nueva colección El Resplandor en el festival de Arte en los Jardines otra vez. Tendré todos los dedos cruzados durante toda la duración de la feria e incluso puede que hasta rece por una venta o dos.

Con suerte, esto me volverá a imbuir alguna de las esperanzas y confianza en mí misma que tenía antes, a mí y a los que me rodean y me dará, por supuesto unas alas más grandes y más fuertes.